El avión oficial del
presidente de Bolivia, Evo Morales, ha abandonado este miércoles el
aeropuerto de Viena después de una escala forzosa de más de 13 horas.
Morales y su comitiva, que incluye al ministro de Defensa, Ruben Saavedra, han
salido rumbo a España para hacer una parada técnica en Las Palmas de
Gran Canaria, en su camino a La Paz.
Según las autoridades bolivianas, el avión de Morales tuvo que aterrizar
en la capital austríaca porque Francia, Portufal e Italia negaron los permisos
al aparato para cruzar su espacio aéreo o repostar. Las
autoridades bolivianas aseguran que los países europeos sospechaban que
el extécnico de la CIA, Edward
Snowden , podría encontrarse a
bordo del avión presidencial.
El propio Morales había afirmado que España había concedido inicialmente
el permiso para repostar en Canarias, pero que dicho permiso fue
posteriormente anulado.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha
asegurado que España "en ningún caso" prohibió al
presidente boliviano aterrizar en territorio español.
Según Margallo, el Gobierno español dio una autorización para
que Morales hiciera escala en las Islas Canarias, pero el avión
"no aterrizó en el plazo previsto", por lo que posteriormente
se solicitó "una ratificación" de dicha autorización, que se ha
producido a primera hora de la mañana.
Margallo ha negado
también que se solicitase "registrar el avión" antes de su partida.
LA POLICIA REGISTRO EL AVION
Antes de la partida, la Policía austríaca comprobó que Snoeden no se
encontraba a bordo del avión de Morales. Según ha informado el ministro de
Exteriores austríaco, Michael Spindelegger, un agente llevó a cabo un
"registro voluntario", autorizado por el piloto del avión
presidencial. "Tras este registro voluntario podemos descartar que
haya una persona a bordo que no tenga la nacionalidad boliviana",
ha señalado el ministro austríaco.
"Es una información importante para todos que no haya un
polizón a bordo del avión presidencial. Se ha tratado de un rumor tan
persistente que ha causado problemas mundiales", ha reconocido
Spindelegger.
El embajador de Bolivia ante Naciones Unidas, Sacha
Llorentty, ha calificado lo sucedido como "agresión" y ha mostrado su
convencimiento de que la orden para impedir el vuelo del avión presidencial partió
de los Estados Unidos. Bolivia pedirá al secretario general, Ban Ki
moon, que investigue lo sucedido.
El paradero del extécnico de la CIA es desconocido, aunque las últimas
informaciones, confirmado por las autoridades rusa , le situaban en el área de tránsito del
aeropuerto de Sheremétyevo, en Moscú. Allí llegó, procedente de Hong Kong, el domingo 23 de
junio, con un salvoconducto emitido por la embajada de Ecuador en Londres. "En este momento, no sabemos dónde está",
informa, desde Moscú, el corresponsal de TVE, Carlos Franganillo.
EMBAJADOR ESPAÑOL INTENTO SUBIR A BORDO, según Morales
Morales ha indicado que, durante la madrugada, el embajador de
España en Viena, Alberto Carnero, acudió al aeropuerto y le pidió que le
invitara a tomar un café en el avión.
"No se lo podía permitir. Primero, no soy ningún
delincuente. Y segundo, ustedes saben, por normas internacionales, que
un avión oficial, el presidente, tienen inmunidad y es inviolable", ha
explicado Morales, en declaraciones recogidas por Efe.
El presidente boliviano
ha insistido en que no accedió a esa petición "por una cuestión de
dignidad".